viernes, 29 de junio de 2007

Cómo soportar al compañero que se convirtió en jefe


No todos los "ascensos" y "descensos" dentro de la línea de jerarquía de una empresa son bienvenidos por el resto del equipo.

Cómo moverse en medio de los cambios :

Quien trabaja sabe que no siempre es fácil asumir que se ha ascendido a un compañero y que, de ahora en más, lo “mandará” en las tareas que le tocan llevar a cabo a diario.

De hecho, para Daniela de León, directora de Dale Carnegie, “éste es uno de los acontecimientos más desagradables en la carrera: su compañero del trabajo convertido en su jefe”, y bien advirtió que la transición no resulta fácil “para ninguno de los dos lados”.

Uno de los principales problemas es que “el nuevo jefe, a no ser que no tenga ni un hueso de sensibilidad, debería sentir un pequeño recelo al mandar a sus antiguos pares, especialmente a aquellos que eran amigos”, explicó y entendió que “se requieren buenas habilidades interpersonales para asignar tareas de modo colegial y no parecer un pequeño Napoleón pavoneándose de su nuevo poder”.

A veces, el compañero ascendido resulta ser realmente un amigo. Y lo que ocurre es que puede modificarse la comunicación entre ambos, que ya no pertenecer a igual escalafón de la compañía. “El ascenso también trae acceso a un nuevo mundo de información de dirección. Puede ser difícil guardar secretos a los antiguos confidentes o limitar las sesiones de chismes en la sala de descanso del pasado”, apuntó de León.

“Mientras el jefe recién designado puede tener la promoción y la prisa de las nuevas responsabilidades para salvar cualquier herida emocional respecto de la ruptura con su compinche, es el amigo olvidado quien algunas veces se lleva la peor parte lidiando con la realidad de cambio en las relaciones del trabajo”, explicó.

De León detalló ideas de Dale Carnegie Training para manejar el tema. Son las siguientes:

* Tratar de eliminar todo sentimiento o resentimiento. El compañero no tomó el nuevo puesto para herir a otro. Además, la posibilidad para avanzar puede ser la siguiente.

* Compartir cualquier daño con alguien fuera de su lugar de trabajo. No hablar del tema dentro de la oficina porque seguramente regresará a su jefe/amigo.

* Recordar que la transición del amigo también puede ser difícil

Ser paciente para ver cómo resulta su relación.

* Está bien ofrecer críticas constructivas, pero hay que comprender que ya no se está criticando con un par más.

* No explotar la relación de amistad monopolizando la atención de su nuevo jefe, pero reconocer que su amistad crea capital político que puede usarse sabiamente para ayudar a su carrera y a su equipo de trabajo.



Por Andrea Sambuccetti Infobae.com

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martes, 26 de junio de 2007

La urbanidad ¿Ha caído en el olvido?



Según el diccionario de la Real Academia Española de la lengua la urbanidad es: Cortesanía, comedimiento, atención y buen modo. El diccionario de la RAE resume, perfectamente, en cuatro términos todo lo que nos lleva a tener una mejor convivencia con los demás. Del latín urbanitas (urbanitatis) la urbanidad son una serie de pautas de comportamiento que se deben cumplir y acatar para lograr una mejor relación con las personas con las que convivimos y nos relacionamos.
Recordar la palabra urbanidad no tiene porque llevarnos a viejos y estirados manuales donde se daban e imponían estrictas normas de comportamiento totalmente inadecuadas, en su mayoría, a los tiempos actuales. Esa rigidez e intransigencia en la educación ha creado un cierto "halo" negativo a la palabra urbanidad.
Cualquier sociedad cuenta con unas normas de comportamiento, no escritas en la mayor parte de los casos, pero que sin su tutela nos haría ser un grupo de seres incivilizados que campan a sus anchas.
Saber que es mejor caminar por nuestra derecha, que las cosas se piden por favor, que se da las gracias por casi todo ... y otras muchas pequeñas cosas hacen que nuestra vida sea mucho más agradable.
Pero como todas las reglas, leyes o normas, no solamente es suficiente con saber que existen, sino que hay que ponerlas en práctica. A diario, en cualquier situación se puede ser cortés. No hay que desaprovechar ninguna ocasión por dos motivos: poner en práctica lo que nos han enseñado y a su vez dar un estupendo ejemplo a los que nos ven.
Gozar de un buen "tacto social" nos puede ayudar en multitud de situaciones, tanto sencillas como algo más complejas. Desenvolverse en los distintos ámbitos sociales debería ser una de las mejores asignaturas de nuestra enseñanza.
Puedes ser el que más conocimientos tenga de su profesión o carrera profesional, pero sin una buena dosis de "urbanidad" puede que sea la persona menos querida de su entorno. Saber agradar, comportarse de modo correcto en cualquier ocasión, mostrar nuestro mejor "barniz social" cual pavo real que muestra su majestuosa cola puede hacernos ganar la simpatía de todo nuestro entorno. Ese cariño se refleja en la actitud de las personas que nos rodean y se extraña cuando falta.
Por eso nos preguntamos ¿ qué es urbanidad ?. Saber convivir, saber agradar y saber estar, aderezado con un toque de estilo.
(Autor: Charls Rou).

viernes, 22 de junio de 2007

Hay modales que se han hecho humo












- Saludar con respeto a una persona mayor, lo que implica ponerse de pié cuando ésta entra a donde estamos.

- Dar el asiento a las personas mayores o mujeres embarazadas.

- Estar limpios a la hora de comer y comer bien, usando servilletas y cubiertos como se debe.

- Saber escuchar y no interrumpir a alguien cuando habla.

- Respetar la autoridad del profesor.

- No secretearse en público ni comentar las intimidades de la familia.

- Golpear ante una puerta cerrada.

- Colocar la televisión o la radio a volumen moderado.

- Ofrecer ayuda.

-No faltar el respeto a las personas mayores

-Aprender a guardar reserva si alguien nos confia algo personal


Por eso debemos educar, quiere decir enseñar a los niños desde muy pequeños los buenos modales. No hay nada mas agradable que conocer a una persona educada, sencilla, elegante. Debemos dar ejemplo. Nada conseguiremos con enseñar sino lo ponemos en práctica y así conseguiremos formar personas educadas y sencillas y que se les haga un hábito el buen comportamiento.

jueves, 21 de junio de 2007

Buen comportamiento con los vecinos


1. Nunca debe expresar críticas hacia los vecinos, a menos que sea absolutamente necesario y constructivo, en cuyo caso debe hacerse con sumo tacto y diplomacia.
2. Debe ir a dar la bienvenida a los vecinos recién llegados. Lo ideal es que esta visita se haga durante las primeras veinticuatro horas de estancia en la nueva residencia. La visita debe ser breve y se hace con el propósito de entablar unas relaciones buenas y cordiales.
3. Durante la visita, los anfitriones o nuevos vecinos suelen brindar a sus invitados un trago, café o té, con bocadillos, saladitos o cualquier otro entremés.
4. Esta visita debe efectuarse a una hora bastante después de la cena para dar tiempo a que la familia retire la mesa y se prepare para sus invitados. De este modo habrá tiempo suficiente y tranquilidad para conversar.
5. Los temas que pueden tratarse en esta primera visita son esencialmente relacionados con el vecindario, las facilidades de transporte y de comercio en la zona, los parques de recreación, etc. Nunca debe dejar que la conversación se desvíe y le lleve a divulgar información personal o críticas hacia otros vecinos.
6. Esta primera visita debe ser una reunión informal, y los anfitriones deben vestirse y comportarse en una forma muy casual para no causar impresiones falsas; eso dará una sensación de sinceridad y sencillez que favorecerá el desarrollo de una buena relación de confianza y amistad.
7. Las visitas nunca deben extenderse demasiado. Una hora es un plazo razonable para realizar esta primera visita. Si más adelante se hace otra invitación, entonces ésta puede prolongarse un poco más.
(Autor: Manuel Antonio Carreño. )

Tomado de:Protocolo y etiqueta

lunes, 18 de junio de 2007

Buenos modales ( niños de 7 a 12 años)



Hay modales que se han hecho humo:

- Saludar con respeto a una persona mayor, lo que implica ponerse de pié cuando ésta entra a donde estamos.

- Dar el asiento a las personas mayores o mujeres embarazadas.

- Estar limpios a la hora de comer y comer bien, usando servilletas y cubiertos como se debe.

- Saber escuchar y no interrumpir a alguien cuando habla.

- Respetar la autoridad del profesor.- No secretearse en público ni comentar las intimidades de la familia.

- Golpear ante una puerta cerrada.

- Colocar la televisión o la radio a volumen moderado.- Ofrecer ayuda.


SENSATEZ y SENTIMIENTOS

El adolescente tiende a vivir apasionadamente, pero hay que encauzar toda esa energía. Ellos en ocasiones, con funden la filosofía con que se toman la vida con la mediocridad. Por eso resulta apropiado ayudarles a llenar la vida con algo que les dé sentido, útil para ellos mismos y la sociedad. Todo lo contrario a una vida arrastrada y vulgar.

Sin duda, cada día la espontaneidad cobra un rol más preponderante en todo el proceso social. Gracias a ella, padres e hijos están más próximos, las generaciones se han acercado y comprendido mejor, e incluso es un valor que ayuda a la formación del propio carácter: hoy se considera fundamental moverse en un clima de confianza. Pero no es menos cierto que a veces, escudados en el "ser uno mismo", se atropella a los otros, sus sentimientos y su espacio. De ahí el sabio consejo: "Conviene añadir sensatez a la sinceridad para no caer en la idiotez sincera, que no por ser sincera, deja de ser idiota".

Lo anterior, en términos de diccionario, significa moderación, reflexión, cautela, ponderación... es decir, usar el sentido común y simplemente, ponerse en el lugar del otro. En otras palabras, el equilibrio del carácter exige una cuidadosa compensación entre los extremos

Una experta en el tema es Sylvia Gubbins de Bustamante, embajadora de Perú en Chile hasta el año 1985. Narra su experiencia: "Soy una convencida de que los niños no nacen conociendo la buena educación y es un deber de los padres instruirlos en ella. Creo que consiste básicamente en mostrarles la manera de tratar a la gente, a todos con igual consideración, desde un rey a un mendigo. En esto, hay forma y fondo, porque el saber agradecer, comportarse y conversar con los otros, demuestra cultura y respeto hacia el prójimo".

DAR EJEMPLO

Está claro que junto con la llegada de la adolescencia, los hijos se ponen rebeldes y adoptan un aire de suficiencia. Esto es natural y demuestra el crecimiento que están viviendo al reafirmar su personalidad. Sin embargo, como parte de ese proceso es necesario que asuman tres actitudes:- Los valores esenciales no se cambian por moda o por edad.

- Criticar es natural en estos años, pero proponer soluciones positivas es siempre mejor.

- Ponerse en el lugar del otro.

Sin estos ingredientes, los adolescentes crecerán sin haber aprendido a manejarse bien socialmente. Carecerán de lo que se ha denominado "inteligencia social" -que es saber llegar a las personas en el momento adecuado y en la forma oportuna- tan útil en la vida personal y profesional

.La adolescencia es un período en que los jóvenes necesitan cerca a sus padres y los requieren como tales: en el papel de guías y dando ejemplo. ¿Qué sacan los padres con exigir buenas maneras si "pelan" descarnadamente a otros, pelean a gritos o mienten al no querer recibir una llama da telefónica que no se atreven a enfrentar?

Es importante que los papás distingan entre lo que es una terquedad propia de la etapa, y lo que es ser mal educado. El aspecto estético de si usan el pelo más largo o un arito, puede disgustar, pero éstos son asuntos transables, comprendiendo que es propio de la juventud. Lo que no se debe transar nunca es el respeto a los demás. Porque en definitiva eso constituye el fondo de los buenos modales: la sensibilidad hacia los otros".




Fuente:Encuentra.com


martes, 12 de junio de 2007

La ropa habla y dice muchas cosas sobre su dueño....


Si es un líder nato, una persona insegura, bien o mal educada, todo puede advertirse a partir la vestimenta que una persona elija. Aprenda a desentrañar personalidades con sólo prestar atención a quien pasa delante suyo
Según dicen expertos, "la ropa habla y dice muchas cosas sobre su dueño". El sitio En Plenitud publicó que una vez que las personas aprenden a prestar atención a este aspecto ya no tendrán que guiarse por lo que le digan, que a menudo puede ser falso, y que podrán comenzar a hacerse de información desde una fuente novedosa, confiable y no verbal.
Cada quien con su cada quien
Si alguien viste de apariencia pulcra -dado que la mayoría de los jóvenes no lo son- será con frecuencia el resultado de años de entrenamiento en manos de padres severos o años de usar uniforme en la escuela o en el ejército. Asimismo, podría tratarse de un deseo poderoso de ser la antítesis de unos padres descuidados. Lo cierto es que esta apariencia apunta a una disciplina fuera de lo común que suele traducirse en una ética fuertemente ejercitada y en un hábito de conclusión de lo iniciado.
Por el contrario, un atuendo descuidado (con prendas demasiado grandes, demasiado pequeñas, están hechas harapos o no han conocido lo que es una plancha) marca la presencia de que el usuario carece de disciplina y que no se interesa en los detalles. Puede ser el resultado de haber crecido en un ambiente en donde la vestimenta adecuada no era una prioridad, o puede tratarse de una rebelión contra una crianza severa y estructurada. A menudo, un atuendo descuidado viene acompañado de un ámbito laboral desordenado, un auto sucio y una casa descuidada. Vestir a la moda, pero sin sentido común (como usar pantalones cortos en lo más crudo del invierno o sandalias en la nieve) "muestra" a una persona insegura, cuyo único objetivo es seguir ciegamente una tendencia para llamar la atención, sentirse importante y elevar su autoestima. Un atuendo desarreglado con accesorios de nivel o lo que denominan un look “quiero pero no puedo” es una característica segura de alguien que aspira a algo que no es; nada que ver con una persona verdaderamente adinerada y distinguida. El sujeto rico no necesita confiar en los símbolos para mostrar su abundancia, sino que elige invertir en telas exquisitas y confecciones expertas, acompañadas de un calce a medida.
Demasiada piel a la vista -escotes profundos, pantalones de tiro bajo, y polleras excesivamente cortas- no son necesariamente una sabia elección. Mientras que no existe un sustituto para el calce adecuado de la ropa, sí hay una delgada línea entre mostrar la figura y hacer ostentación del cuerpo. Dicen que las ropas deben ser lo suficientemente ceñidas como para mostrar la figura de mujer, y lo suficientemente sueltas como para dejar ver que es una dama. Y hay una gran verdad en este dicho: los hombres ven a las mujeres que muestran mucha piel como posibles compañeras de cama. No obstante, aquéllas que se visten en forma más conservadora suelen ser vistas como compañeras de vida.
Evento correcto, vestimenta equivocada:Las personas que usan ropas inapropiadas para una situación, a menudo, son vistas como poco instruidas.
Si ellas desconocen las prendas que constituyen un atuendo de negocios apropiado, por ejemplo, los demás asumirán que hay alguna carencia en su educación. Ahora, usted seguramente se tomará un tiempo para analizar su propia apariencia y determinar qué está queriendo decir al resto de las personas.
Infobae.com

sábado, 9 de junio de 2007

Otro artículo de interés: Niños de 1 a 3 años



Entre el primer y el segundo cumpleaños, los niños
Son enérgicos, activos y curiosos;
Son un poco egoístas;
Les gusta imitar los sonidos y las acciones de otras personas (por ejemplo, al repetir las palabras que sus padres y otras personas dicen y al fingir ayudar en los quehaceres domésticos con los adultos);
Quieren ser independientes y hacer las cosas por sí mismos;
Tienen una duración de atención muy corta si no están involucrados en una actividad que les interesa;
Exploran variaciones con sus destrezas físicas (por ejemplo, intentando caminar hacia atrás);
Comienzan a ver en qué son parecidos o diferentes que otros niños;
Juegan solos o con otros niños;
Incrementan sus vocabularios de 2 o 3 palabras a más o menos 250 y comprenden cada vez más lo que la gente les dice;
Piden que sus padres y otras personas les lean en voz alta, pidiendo frecuentemente sus libros o cuentos favoritos; y
Fingen leer y escribir de la manera que ven a sus padres y otras personas hacerlo.
Entre el segundo y el tercer cumpleaños, los niños
Son más conscientes de otras personas;
Son más conscientes de sus propios sentimientos y pensamientos;
Suelen ser tercos y a veces hacen rabietas;
Pueden caminar, correr, saltar, brincar, rodar y trepar;
Incrementan su vocabulario de 250 a 1,000 palabras en el transcurso del año;
Pueden hablar en oraciones cortas de 2, 3 o 4 palabras;
Comienzan a escoger sus cuentos y libros favoritos para leer en voz alta;
Comienzan a contar;
Comienzan a prestar atención a la escritura, como las letras de sus nombres;
Comienzan a distinguir entre los dibujos y la escritura; y
Comienzan a hacer garabatos, marcando símbolos que parecen letras.
Los niños entre 1 y 2 años requieren de :
Oportunidades para tomar sus propias decisiones: "¿Quieres usar la taza roja o la azul?";
Límites claros y razonables;
Oportunidades para utilizar los músculos mayores en los brazos y las piernas;
Oportunidades para utilizar los músculos menores para manipular objetos pequeños, tales como piezas de rompecabezas y juegos para amontonar;
Actividades que les permitan tocar, probar, oler, escuchar y ver cosas nuevas;
Oportunidades para aprender sobre las "causas y efectos" -- las cosas que causan que otras cosas sucedan (por ejemplo, los bloques se caen cuando se apilan demasiado alto);
Oportunidades para desarrollar y practicar sus destrezas de lenguaje;
Oportunidades para jugar con y aprender sobre las letras del abecedario y los números; y
Oportunidades para aprender sobre los libros y la escritura.

Los niños entre los 2 y 3 años requieren oportunidades para :
Desarrollar la dexteridad manual (por ejemplo, cómo agarrar los crayones y lápices, cómo armar un rompecabezas o hacer un collar de cuentas:
Hacer más cosas por sí mismos, como vestirse solos;
Hablar, cantar y desarrollar su lenguaje;
Jugar con otros niños y desarrollar sus destrezas sociales;
Experimentar con nuevas formas de mover sus cuerpos;
Aprender más sobre la escritura y los libros y cómo funcionan;
Hacer cosas que les ayuden a incrementar su vocabulario y su conocimiento, y que les ayuden a aprender más sobre el mundo; por ejemplo, salir a caminar y visitar bibliotecas, museos, restaurantes, parques y zoológicos.

miércoles, 6 de junio de 2007

¡Hay un monstruo en mi cuarto!


A veces los niños desarrollan temores que parecen ridículos o irrazonables. No obstante, sus temores son muy reales para ellos, y necesitan encontrar formas para superarlos.


Qué hacer


Escuche cuidadosamente cuando su niño le dice que le tiene miedo a algo—un monstruo en su cuarto o un sonido desconocido—aunque su temor le parezca a usted ridículo.

Intente comprender qué está causando el temor. ¿Es posible que vio algún bulto desconocido debajo de la cama o en su clóset? ¿Acaso el ruido que lo espanta es parecido a algún ruido que escucho hacer a un fantasma en un programa de televisión? Ayudar a su niño a superar sus temores fortalece su valor y autoconfianza.
Junto con su niño, formule un plan para enfrentar su temor. Repasen el plan juntos. Permita que su niño tome el paso que confronta el temor, aunque será útil que usted esté presente. Por ejemplo, vaya con él a ver debajo de la cama o en su clóset para ver exactamente qué vio. Siéntese con él y escuche cuidadosamente al ruido que hace el viento en la ventana. Explíquele que a veces el viento hace ruidos algo espantosos pero que no son nada peligrosos o dañinos.
No permita que su niño pequeño vea películas de terror o juegue juegos electrónicos violentos. Investigaciones científicas han demostrado que el temor que los niños sienten al ver una película de horror puede durar años, afectando su sueño y otros comportamientos.

Los niños de distintas edades se asustan con diferentes tipos de películas. Por ejemplo, imágenes horrorosas, como monstruos, asustan a los niños entre las edades de 3 a 8 años. La violencia realista, tal como pudiera suceder en realidad, asusta a los niños entre las edades de 9 a 13 años.
Los niños mayores pueden temer el juicio de sus amigos. Ayude a su niño a desarrollar un sentido de independencia de lo que sus amigos pudieran pensar de él y de lo que promueven los medios de comunicación. Apoye a su niño mientras él adopta su propio estilo y sus propias ideas.



Tomado de: ed.gov

martes, 5 de junio de 2007

¿Qué más puedo hacer para ayudar a que mi niño se comporte bien?


Haga una lista corta de reglas importantes y repítala con su niño. Evite las peleas por quién tiene el poder, las situaciones en que nadie gana y los extremos.

Cuando piensa que reaccionó excesivamente, es mejor solucionar el problema con sentido común, a pesar de que tenga que ser inconsistente con el método del premio o el castigo. Evite hacer esto con frecuencia ya que puede confundir a su niño.

Acepte la personalidad básica de su niño, ya sea que es tímido, sociable, hablador o activo. La personalidad básica puede cambiar un poco, pero no mucho. Trate de evitar las situaciones que pueden hacer que su niño se ponga irritable, por ejemplo estar sobre estimulado, cansado o aburrido. No critique a su niño en frente de otras personas. Describa el comportamiento de su niño como malo pero nunca califique a su niño como que él es malo. Elogie a su niño con frecuencia cuando él o ella se lo merezca. Tóquelo con cariño frecuentemente. Los niños quieren y necesitan el afecto de sus padres.

Desarrolle pequeñas rutinas y rituales; especialmente a la hora de acostarse y a las horas de las comidas. Proporcione frases de transición como "en cinco minutos vamos a terminar de comer". Siempre que sea posible dele opciones a su niño. Por ejemplo, usted puede preguntarle "¿Quieres ponerte la piyama roja o la piyama azul para acostarte esta noche?"A medida que los niños crecen ellos pueden disfrutar el estar involucrados en hacer las reglas de la casa. No debata acerca de las reglas en el momento del mal comportamiento, pero invite a su niño a participar en crear las reglas en otro momento.

Los niños que aprenden que el mal comportamiento no se tolera y que el buen comportamiento se premia están aprendiendo destrezas que les durarán toda la vida.
tomado de: familydoctor.org

lunes, 4 de junio de 2007

Para los niños:¿cómo fomento un comportamiento nuevo y deseado?..


Una forma de fomentar el buen comportamiento es usar un sistema de premio. Esto funciona mejor en niños mayores de dos (2) años de edad.

Se puede tomar hasta dos (2) meses para que funcione. Continuar pacientemente y llevar un diario de comportamiento puede resultar útil para los padres.

Escoja uno (1) o dos (2) comportamientos que le gustaría cambiar: por ejemplo los hábitos antes de acostarse, el cepillado de los dientes o la recogida de los juguetes.

Escoja un premio que su niño vaya a disfrutar. Ejemplos de buenos premios son leerle una historia adicional a la hora de acostarse, permitirle acostarse media hora más tarde, darle un bocado pequeño que le guste, o para niños mayores ganar puntos para un juguete especial, un privilegio o una cantidad pequeña de dinero.

Explíquele al niño el comportamiento deseado y el premio. Por ejemplo, "si te pones la piyama y te lavas los dientes antes de que se termine este programa de televisión, te puedes acostar media hora más tarde".

Solicite el comportamiento solo una vez. Si el niño hace lo que usted le pide dele el premio. Usted puede ayudar al niño si es necesario, pero no se involucre demasiado. Puesto que cualquier atención por parte de los padres —inclusive atención negativa— es tan gratificante para los niños, ellos pueden preferir al principio atención de sus padres en vez del premio.

Las frases de transición tales como "en cinco minutos se acaba el tiempo de juego " son útiles cuando usted le está enseñando a su niño comportamientos nuevos.Este sistema ayuda a evitar las peleas por quién tiene el poder con su niño. Sin embargo, su niño no es castigado si decide no comportarse como usted le pide; simplemente, él o ella no recibe el premio.

viernes, 1 de junio de 2007

Cómo ayudar a su hijo a ser un ciudadano responsable




Los buenos modales son parte de lo que significa demostrar nuestro respeto a otras personas.


Si usamos juegos para reforzar los buenos modales, proveemos a los niños la práctica que necesitan para aprenderlos sin sentir vergüenza—y evitamos la vergüenza nosotros mismos


Hágale saber al niño que el respeto a otras personas puede comenzar con algo tan básico como demostrar buenos modales, como por ejemplo
-extender la mano cuando saludan a alguien;
-mirar a los ojos cuando platican con alguien;
-decir "por favor," "gracias," "perdón," y "disculpe";
-abrir puertas para otras personas;
-usar expresiones como "sí, señor," o "sí, señora" cuando hable con personas mayores; y
-ceder su asiento en un autobús o metro a una persona mayor o a una persona con discapacidad.
A la hora de la comida o la cena, pida que los miembros de la familia hagan como si estuvieran comiendo en un restaurante. Pida que su niño demuestre cómo debe hablar con usted y las otras personas sentadas a la mesa. ¿Qué debe decir cuando "el mesero" le sirve su comida? ¿Cómo debe comer? ¿Qué debe decir si quiere alejarse de la mesa?

Ponga varias sillas en una hilera y pida que su niño y otros miembros de la familia hagan como que van en el autobús. Pida que su niño le demuestre qué debe hacer o decir si el autobús se detiene repentinamente y el niño se tropieza con otro pasajero.


¿Cómo debe cargar un bulto en el autobús para que nadie se lastime o moleste a los otros pasajeros? ¿Qué debe hacer si está sentado en el autobús y entra un anciano y no hay más lugar?
Cuando el niño mencione que alguien hizo algo amable por él, aliéntelo a escribir una notita para agradecer el favor. Explique que una nota no tiene que tener demasiadas palabras. Para los niños menores, también puede incluir dibujos. Después de que prepare la nota, ayude al niño a repasar lo que ha escrito, y hacer correcciones de ortografía y puntuación. Explique que tomar el tiempo para revisar y corregir lo que hemos escrito demuestra respeto a la persona que recibe la nota.
Permita que su niño le vea escribiendo notas de agradecimiento o consideración a otras personas. Quizás quiera preparar una notita al cartero por ayudarle con un paquete pesado, o a un vecino para desearle buena suerte en su próxima entrevista, o a un pariente para felicitarlo por el premio que se ganó.




tomado de:www.ed.gov.






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