Sé cuanto quisieras poner en grande el nombre de tu compañero, pero cuan triste es la realidad. No es que sea malo, porque malo no lo es; le falta madurez, comprensión, pensar un poco en los demás, no ser agresivo y así la vida no sería tan triste, no estarías tan sola, porque no se necesitan de amistades para ser feliz, te falta su apoyo que es la mejor compañía, te falta contar con su risa y no con su amargura. De vez en cuando debe ayudarte con los quehaceres de la casa, que tú no eres de fierro, lo único que conseguirá es que tú te enfermes, que te quiebres, que cuelgues de un abismo suspendida de un hilo, que sin lugar a dudas algún día se romperá.
Ahora si tu vieras que es todo lo contrario que es de ella de la que se habla así, justo sería su comportamiento.
Así que piensa, medita y no sea el orgullo que te haga cerrar los ojos y tapar los oídos porque aunque no lo creas hay un testigo al que no se le puede engañar y ese testigo es Dios.
1 comentario:
es bueno a veces poder aceptar un consejo.. uno siempre piensa que tiene razón y no escucha al otro ni mucho menos entiende. hay que ser compañero ya que de eso se trata una pareja. me costo mucho entenderlo pero gracias que con tiempo lo logre y ahora estamos buscando apartamentos en buenos aires para irnos a vivir juntos
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