Esta es una historia que demuestra que las apariencias engañan y que el arribismo es un mal social muy difundido:
Un señor de unos 68 años dueño de una parcelita cerca de Santiago decide viajar a la capital a comprar llevando como único equipaje una bolsa de papel. Acude a una agencia de automóviles y luego de observar los vehículos se dirige hacia el vendedor quien le saluda de manera despectiva ( el anciano no estaba bien vestido y daba mala impresión). El señor decide explicarle al vendedor que desea comprar 2 camionetas y el vendedor para evitar el diálogo con el "viejo del campo" contesta a cada una de sus preguntas con monosílabos y mantiene un trato distante.
En vista de la situación el anciano decide retirarse y acudir a otra agencia de vehículos cercana, en la cual recibió un trato afable por parte del vendedor, con respeto, aunque el funcionario pensaba que iban a tenerle que dar un largo crédito al hombre para que hiciera su compra y solo para una camioneta.Estaba equivocado... el señor ofreció pago al contado por dos camionetas y al momento de firmar, sacó de su bolsa sendos fajos de billetes con la cantidad necesaria para hacer su compra, además le dió una suculenta gratificación al vendedor por su amabilidad.
Esta historia nos hace pensar ?¿ Qué nos hace cambiar? ¿ Por qué cuando niños nos enseñan a saludar, a dar las gracias, a ser respetuosos con las personas, si después nos damos cuenta que nuestros padres no saludan y no tienen el mismo trato con las personas?
Creo que el hombre que barre la calle, el del mercado, el del kiosko, son tan seres humanos como el resto, no sabemos sus vidas y por qué no llegaron a ser profesionales. No es necesario ser intimos amigos, pero el respeto debe prevalecer. Un buen saludo y un gracias no nos hace perder "status", todo lo contrario nos enseña a ser mas humanos y a demostrar "educación"
Tener mas o menos dinero no significa nada, porque las apariencias engañan. Un apellido con historia, un auto de "marca"!, una buena vestimenta es solo envoltorio, lo que vale está dentro. Recordemos que cuando uno muere, lo dejamos todo y nos comen los gusanos a todos por igual, ricos y pobres.
La diferencia está en cuántas personas lamentarán y llorarán nuestra partida por el amor que sembramos a todos en este mundo.
Escrito por Pilar Medina
Tomado de : El obsertatodo
Un señor de unos 68 años dueño de una parcelita cerca de Santiago decide viajar a la capital a comprar llevando como único equipaje una bolsa de papel. Acude a una agencia de automóviles y luego de observar los vehículos se dirige hacia el vendedor quien le saluda de manera despectiva ( el anciano no estaba bien vestido y daba mala impresión). El señor decide explicarle al vendedor que desea comprar 2 camionetas y el vendedor para evitar el diálogo con el "viejo del campo" contesta a cada una de sus preguntas con monosílabos y mantiene un trato distante.
En vista de la situación el anciano decide retirarse y acudir a otra agencia de vehículos cercana, en la cual recibió un trato afable por parte del vendedor, con respeto, aunque el funcionario pensaba que iban a tenerle que dar un largo crédito al hombre para que hiciera su compra y solo para una camioneta.Estaba equivocado... el señor ofreció pago al contado por dos camionetas y al momento de firmar, sacó de su bolsa sendos fajos de billetes con la cantidad necesaria para hacer su compra, además le dió una suculenta gratificación al vendedor por su amabilidad.
Esta historia nos hace pensar ?¿ Qué nos hace cambiar? ¿ Por qué cuando niños nos enseñan a saludar, a dar las gracias, a ser respetuosos con las personas, si después nos damos cuenta que nuestros padres no saludan y no tienen el mismo trato con las personas?
Creo que el hombre que barre la calle, el del mercado, el del kiosko, son tan seres humanos como el resto, no sabemos sus vidas y por qué no llegaron a ser profesionales. No es necesario ser intimos amigos, pero el respeto debe prevalecer. Un buen saludo y un gracias no nos hace perder "status", todo lo contrario nos enseña a ser mas humanos y a demostrar "educación"
Tener mas o menos dinero no significa nada, porque las apariencias engañan. Un apellido con historia, un auto de "marca"!, una buena vestimenta es solo envoltorio, lo que vale está dentro. Recordemos que cuando uno muere, lo dejamos todo y nos comen los gusanos a todos por igual, ricos y pobres.
La diferencia está en cuántas personas lamentarán y llorarán nuestra partida por el amor que sembramos a todos en este mundo.
Escrito por Pilar Medina
Tomado de : El obsertatodo